La bomba de aceleración es uno de los componentes esenciales en la mecánica de un coche. En los vehículos que usan carburación como sistema de alimentación, este artefacto tiene como principal función proporcionar al motor un extra de combustible en el momento de acelerar, de forma que se pueda mantener la proporción ideal entre aire y combustible en el momento de absorber una mayor cantidad de aire.

Funcionamiento de la bomba de aceleración

El funcionamiento de la bomba de aceleración se puede describir en tres fases principales: activación, inyección y recalibración.

La activación tiene lugar cuando el conductor presiona el pedal del acelerador, haciendo que una membrana dentro de la bomba se comprima y succione una cantidad de gasolina del carburador.

La inyección es la fase donde se desplaza la gasolina del interior de la bomba hacia las cámaras de mezcla del carburador, enriqueciendo la mezcla de aire y combustible listo para ser combustiado.

La recalibración se realiza inmediatamente después, se libera la presión sobre la membrana de la bomba para que vuelva a su estado inicial y se llene de nuevo con combustible.

Historia y evolución de la bomba de aceleración

La bomba de aceleración ha evolucionado continuamente desde los inicios de la automoción. Su historia comenzó con los primeros vehículos que requerían un sistema que permitiera aumentar rápidamente la potencia del motor. La evolución de este componente ha ido de la mano con el desarrollo de los sistemas de inyección de gasolina, pasando de ser un componente mecánico a un componente controlado electrónicamente en los vehículos modernos.

Inconvenientes y ventajas de la bomba de aceleración

Inconvenientes

El principal inconveniente de las bombas de aceleración es su susceptibilidad al desgaste. El uso constante de este componente puede forzar su membrana y causar fugas de combustible. Además, los depósitos de suciedad también pueden disminuir su eficacia.

Ventajas

Las ventajas de la bomba de aceleración radican principalmente en su capacidad para mejorar la respuesta del motor durante la aceleración, ya que proporciona un suministro adicional de combustible para mantener una proporción adecuada de mezcla de aire/combustible.

Coste de reparación

La reparación de la bomba de aceleración puede variar dependiendo de varios factores, pero en general, se considera un coste medio. Cambiar una bomba de aceleración puede costar entre 100 y 200 euros, esto incluye tanto la pieza como la mano de obra.